En pocas palabras: es agua en su estado natural. Esto se logra gracias a distintas tecnologías aplicadas en un único equipo.
Estas tecnologías son: hidrodinámica del agua (vórtices), materiales piezoeléctricos, frecuencias, luz infrarroja, tratamiento electromagnético, materiales monoatómicos y estáticas.
Se caracteriza por ser más organizada que el agua normal, al pasar por nuestro estructurador éste hace que el agua se forme en una red estructurada de forma hexagonal. Esta estructura determina su capacidad para entrar con mayor facilidad en las células de los distintos organismos, otorgándole un mayor estado energético.
El agua estructurada cargada de electrones protege a las células de perder sus electrones. Considerando a los organismos como una red de electrones que se comunican entre sí, esta agua facilitaría más aun la trasmisión de información a través del líquido extracelular (líquido intersticial, plasma) y del líquido intracelular, provocando una rápida hidratación y una mayor oxigenación celular.